Las casas más pequeñas y más pequeñas se están volviendo cada vez más comunes. Sin embargo, cuando hablamos de la casa más pequeña del mundo, realmente no es lo que esperarías. Científicos franceses han construido una microcasa que se encuentra en el extremo escindido de una fibra óptica para demostrar las capacidades de un nuevo sistema nanorobótico.
La casa más pequeña del mundo fue construida por un equipo del Instituto Femto-ST en Besancon, Francia, utilizando el nuevo sistema nanofábrica Robotex. La configuración incluye una pistola de iones controlada robóticamente y un sistema de inyección de gas. Toda la operación se lleva a cabo dentro de una cámara de vacío para ensamblar microestructuras en las puntas de las fibras ópticas con extrema precisión.
Se utiliza un microscopio electrónico de barrido de doble haz como guía. Dos ingenieros que trabajan en varias computadoras utilizaron el sistema Robotex para crear la casa más pequeña del mundo con membrana de sílice. Solo mide 300 por 300 micrómetros.
El haz de iones se utilizó para cortar una lámina plana de la membrana que luego se utilizó para formar la estructura básica. El sistema de inyección de gas se usó para soldar los bordes unidos. Un haz de iones de baja potencia trabajó junto con el sistema de inyección de gas para bombardear las tejas en el techo.
Los microcanales pueden no ser prácticos en el mundo real, la tecnología que demuestra puede ser muy práctica y puede usarse para ensamblar elementos sensores en las puntas de fibras ópticas tan delgadas como un cabello humano, que luego podrían insertarse en el torrente sanguíneo para detectar virus moléculas.
“Por primera vez pudimos realizar patrones y ensamblajes con menos de 2 nanómetros de precisión, lo cual es un resultado muy importante para la comunidad de robótica y óptica”, dice Jean-Yves Rauch, autor de un artículo sobre la investigación.
Nunca se había visto una tecnología como esta y a medida que se automaticen más procesos, los científicos podrán crear estructuras aún más pequeñas.